Un inglés que vive en España, muy duro con quienes no quieren aprender castellano: «Hay unas reglas»

En España reside una numerosa comunidad británica, especialmente asentada en las costas mediterráneas y las islas. Desde los años 80, la calidad de vida y los precios asequibles han convertido a lugares como la Costa Blanca, la Costa del Sol o Mallorca en auténticos enclaves para jubilados, expatriados y familias británicas. Sin embargo, no todo es armonía: a menudo, esta comunidad vive al margen del resto de la población local, creando una especie de burbuja cultural. Aunque algunos han abrazado las costumbres y el idioma, muchos otros se mantienen distantes, perpetuando una separación que alimenta estereotipos y tensiones. Sobre este tema ha hablado recientemente Benjamin George , un británico afincado en España que comparte su día a día en redes sociales. En uno de sus vídeos más comentados, George critica abiertamente la actitud de muchos de sus compatriotas. Según él, una parte considerable de los británicos que residen en España se resisten a aprender el idioma, creyendo que su condición económica o cultural les exime de adaptarse. El joven subraya que, para vivir en España, existen ciertas normas básicas que deben respetarse, siendo la primera y más importante aprender el idioma. Destaca que tiene muchos amigos ingleses que han aprendido español y que entienden que esta adaptación es esencial para disfrutar plenamente del país que han elegido. George también señala que algunos expatriados parecen olvidar que han dejado atrás sus vidas en Reino Unido en busca de una mejor calidad de vida en España. «Esto no es 'fucking Little Britain', esto es España» , remarca con contundencia, instando a sus compatriotas a respetar la cultura y las leyes del país que los acoge.

Ene 14, 2025 - 19:21
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Un inglés que vive en España, muy duro con quienes no quieren aprender castellano: «Hay unas reglas»
En España reside una numerosa comunidad británica, especialmente asentada en las costas mediterráneas y las islas. Desde los años 80, la calidad de vida y los precios asequibles han convertido a lugares como la Costa Blanca, la Costa del Sol o Mallorca en auténticos enclaves para jubilados, expatriados y familias británicas. Sin embargo, no todo es armonía: a menudo, esta comunidad vive al margen del resto de la población local, creando una especie de burbuja cultural. Aunque algunos han abrazado las costumbres y el idioma, muchos otros se mantienen distantes, perpetuando una separación que alimenta estereotipos y tensiones. Sobre este tema ha hablado recientemente Benjamin George , un británico afincado en España que comparte su día a día en redes sociales. En uno de sus vídeos más comentados, George critica abiertamente la actitud de muchos de sus compatriotas. Según él, una parte considerable de los británicos que residen en España se resisten a aprender el idioma, creyendo que su condición económica o cultural les exime de adaptarse. El joven subraya que, para vivir en España, existen ciertas normas básicas que deben respetarse, siendo la primera y más importante aprender el idioma. Destaca que tiene muchos amigos ingleses que han aprendido español y que entienden que esta adaptación es esencial para disfrutar plenamente del país que han elegido. George también señala que algunos expatriados parecen olvidar que han dejado atrás sus vidas en Reino Unido en busca de una mejor calidad de vida en España. «Esto no es 'fucking Little Britain', esto es España» , remarca con contundencia, instando a sus compatriotas a respetar la cultura y las leyes del país que los acoge.

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