La magia de Bocaditos Deli: Transformando ingredientes comunes en recuerdos inolvidables

Hay quienes ven en la cocina una necesidad, y otros que la convierten en arte. En el caso de Bocaditos Deli, cada pastel, más que un postre, es una experiencia llena de emociones, creatividad y amor.

La pasión de Alejandra Huerta por la repostería comenzó en su adolescencia, pero no fue hasta 2017, durante su estancia en Hacienda de los Morales, que descubrió la magia detrás de los pasteles.

“Ese día me pregunté si algún día podría hacer pasteles así de hermosos”, recordó en entrevista para Cultura Colectiva. Sin embargo, no fue hasta la pandemia de 2020 que su sueño se hizo realidad. 

Con el tiempo libre de su lado, decidió lanzarse de lleno a la repostería, enfrentándose a sus miedos y dejando que la pasión guiara sus manos. Desde cheesecakes hasta pasteles 3D,  cada creación era un nuevo reto, pero también una nueva oportunidad de sorprender.

Inspiración que convierte lo cotidiano en extraordinario

En Bocaditos Deli, cada pastel tiene una historia. “Para cada pastel hay un motivo, un festejo importante. Saber que puedo ser parte de esa felicidad es lo más importante”, explicó Alejandra. Su proceso creativo va más allá de lo técnico: se inspira en el arte, en las ideas de sus clientes y en chefs que admira profundamente.

Transformar ingredientes comunes en pasteles únicos requiere experimentar y arriesgarse. Así nacieron sus pasteles 3D, una técnica que aprendió de forma autodidacta y que le permitió crear diseños que parecen sacados de un museo.  Sin duda, te pondrían a pensar más de dos veces si es “pastel u objeto” de lo increíbles y realistas que se ven.

Entre sus creaciones destacan uniformes de la Sedena, personajes de películas, memes, profesiones y un montón de cosas más. “Lo más emocionante es lograr algo que parece imposible. En mi vocabulario, el ‘no puedo’, no existe”, aseguró.

Si quieres conocer más de su trabajo síguela en Instagram como bocaditos_deli_

Más que un pastel, un recuerdo inolvidable

Lo que hace único a Bocaditos Deli es su capacidad para personalizar sus creaciones. Aquí no hay moldes preestablecidos, cada pastel lleva la esencia del cliente, convirtiéndolo en un regalo memorable que combina olor, sabor y diseño. En pocas palabras, calidad. 

La emoción que sus pasteles generan en los clientes es su mayor recompensa. Desde lágrimas de felicidad hasta admiración, su objetivo es evocar sentimientos profundos y crear momentos inolvidables. 

Y no sólo se enfoca en sus clientes, también busca inspirar a otras personas, especialmente a mujeres jóvenes que desean adentrarse en el mundo de la repostería y emprender su propio negocio, como ella lo hizo.

El arte de transformar con amor

Para la fundadora de Bocaditos Deli, sus pasteles son una forma de arte. Cada detalle está cuidadosamente trabajado, desde los sabores hasta los diseños más complejos, dedicando horas para perfeccionarlos. “Todo lo que hago, lo hago con amor, como si fuera para mi propia hija. Eso lo hace especial”, comentó.

Bocaditos Deli no sólo crea pasteles, sino experiencias únicas que mezclan creatividad, emoción y pasión. Así, lo que empieza como ingredientes simples termina siendo una obra de arte comestible, capaz de transformar cualquier momento en algo extraordinario.